Big Brother
siento tu piel
te beso y te bendigo
me cuesta despertarme
aprieto el boton del ipad
en números grandes 6:48 a.m.
no hay más tiempo, es preciso pararme
estiro la mano
prendo las luces
te pegas a mí
te abrazo fuerte
me pides que detenga mi mano en tu hombro derecho -te duele-
ahí lo dejó reposar con el calor que la palma da
un ronquido
ya no hay tiempo
me levanto
casi dormida me dirijo al baño
mi ropa -a planchar- (pensamiento)
tomo la ducha
hay deseos no concretados
mi vulva aprieta
el agua suavisa mi cuerpo
está entre lo tibio y lo frío
el silencio de tu boca y la mía
salgo de la ducha
cojo la toalla
tomo el cepillo con pasta
lo aplico a mis dientes cercenándolos
pretendiéndo dejarlos blancos como el mismo dentrífico
desollando el amarillo que a diario nutro con ese líquido negro mañanero
de pronto, siento la suavidad de tu mano que se desliza
sigilosamente desde mi espalda bajando lentamente
toca mi hueso izquierdo
encuentra libre el acceso por delante
y se mete hasta rozar
un poco más bajo de mi vientre
luego el toque de tus labios, casi en nada, junto a los míos
espejo matutino
cámara traviesa
y en el radio: las noticias
Sol-Ha-Mi
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